Este bizcocho lo vi muchísimas veces, tanto por amigas como por Internet, pero nunca me dio por hacerlo. Hoy no se porque se me apeteció hacerlo y ha sido una sorpresa muy agradable. Está muy rico y a su vez super vistoso. Empezamos con los pasos a seguir.
En primer lugar haremos un caramelo. Ingredientes para el caramelo:
- 5 cucharadas de azúcar blanquilla
- jugo de una lata de piña de 227 gr
En un cazo al fuego pondremos unas cinco cucharadas de azúcar blanquilla junto al jugo de una lata de piña de 227 gr. Lo llevamos al fuego hasta que hierva y caramelice. Tarda un poco en evaporar el líquido, cuando vaya cogiendo densidad y un poco color dorado.
Segundo paso, utilizaremos un molde circular de unos 26 o 28 centímetros o del que dispongáis. Cubrís con papel de horno recortado con la misma forma de la base del molde, así evitaremos que se pegue y salga perfectamente para desmolde y presentación. Seguidamente el caramelo lo introducimos en el molde, al cual le pusimos el papel.
Le pondremos encima unas 7 o 8 rodajas de piña escurridas quedando en el centro una.
Precalentamos el horno a 180 ºC unos 10 minutos. Y mientras nos ponemos con el bizcocho.
Ingredientes del bizcocho:
- 125 ml de leche semidesnatada o la que tengáis a mano
- 3 huevos
- 250 gr de azúcar
- 375 gr de harina
- 125 ml de aceite de girasol
- 2 sobres gasificante de repostería que uno es lila y otro es blanco de Hacendado, mercadona
- una cucharadita de levadura tipo Royal
- 4 rodajas de piña
- 2 cucharadas de caramelo líquido
- 2 cucharadas jugo de piña
- una pizca de sal
Preparación:
Tamizamos la harina junto con los gasificantes, levadura y pizca de sal; y reservamos. Los huevos lo batimos junta al azúcar, el aceite, leche, el jugo de piña, el caramelo y las cuatro rodajas de piña; y lo trituramos todo en una batidora eléctrica o Thermomix, lo que tengáis.
A continuación agregáis la harina y levadura tamizadas que teníais reservada y batimos unos 10 segundos en la batidora. Apartamos y batimos un poco más manualmente con una cuchara y se lo echamos al caramelo y piña que teníamos en el molde.
Metemos al horno que teníamos precalentado ya unos cuarenta minutos o hasta que introduciendo un palillo de dientes este salga limpio. Cuando termine la cocción del bizcocho lo dejaremos reposar y enfriar en rejilla. Una vez frío desmoldar y emplatar.
La verdad es que este bizcocho está muy rico, tenía que haberlo hecho antes. Y no me digáis que no es vistoso.
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